Cuando un oftalmólogo examine sus ojos, sus pupilas serán dilatadas con gotas. Durante la exploración, su oftalmólogo u oftalmóloga observará cuidadosamente el vítreo y la retina. Debido a la dilatación pupilar, puede tener alguna dificultad para conducir, por lo que sería conveniente que alguien le acompañe. Aunque no todas las “moscas volantes” ni todos los flashes de luz son serios, debe asegurarse de que su retina no ha sufrido daño alguno.